Las cookies pueden ser peligrosas para tu seguridad en el Internet y la mayoría de los navegadores vienen configurados por defecto para aceptar todas las que te consigas de terceros. En algunos casos son buenas para guardar información que no quieres introducir una y otra vez, pero en otros simplemente son una violación a nuestra privacidad o un espacio en disco que se está usando en vano por días, semanas o meses incluso.
Para evitar esto se pueden borrar las cookies y el resto del historial de navegación de forma manual dependiendo del navegador que uses, pero también puedes hacerlo con una extensión llamada Tab Cookies si usas Google Chrome.
Lo que hará Tab Cookies es que va a borrar todas las cookies creadas en cada pestaña una vez que la cierras y así se puede garantizar tu seguridad. Esto quiere decir que si, por ejemplo, vas a Gmail se estará usando una cookie que te mantiene logueado a tu cuenta pero cuando cierres la pestaña esto se detendrá y se borrará por completo.
Para usar la extensión sólo debes instalarla y dejar la forma en la que funciona por defecto, aunque puedes cambiar algunas opciones si quieres. Por otro lado, si quieres que las cookies de un sitio (o pestaña) se guarden, puedes presionar sobre la galletita de chispas de chocolate que vas a tener al final de la barra de direcciones de Chrome, justo al lado de la estrella para agregar un marcador.