Una de las cosas que no hace creer que nuestro sistema está muriendo o no está los suficientemente libre de basura, es el inicio, el arranque de Windows. Cuando esto sucede, y sí que pasa a menudo, es porque hay muchas aplicaciones que inician al mismo tiempo que el sistema lo hace, en ocasiones esto es bueno y algunas lo hacen rápido, pero cuando no es así, la lentitud se adueña de nuestro día.
Una aplicación interesante para evitar esto es My Startup Delayer, un software portable que no ayudará a detectar qué aplicaciones inician con Windows y, además, hace que el arranque sea más lento de lo normal.
Al ingresar al programa nos encontramos con las aplicaciones que inician con Windows por defecto del sistema (HKEY Local Machine), las que venimos instalando y no desactivamos el «inicio con Windows» (HKEY Current User) y las que definimos con el programa para que inicien (User Defined) si aún no lo hacemos.
Como se puede ver, la última opción nos permite añadir aplicaciones que no iniciaban con Windows y así agilizar nuestro trabajo, pero esto bajo riesgo propio porque podrían afectar el inicio del sistema.
Ahora, si queremos que una de las aplicacones no arranque con Windows, simplemente debemos hacer clic derecho sobre ella y elegir «Delayed» para hacer lento su arranque sobre Windows o «disable» para no permitir que arranque cuando se inicie el sistema.
Descarga: My Startup Delayer