Hoy en día, para aquellas personas que usamos Google y Gmail, es posible que ahí tengamos absolutamente todo. En muchas ocasiones también usamos esta dirección de correo para conectarnos a otras cuentas como la de Twitter o la de Facebook y por supuesto, también la de Google+.

Es importante entonces que tengamos una contraseña muy segura y también podemos usar la verificación en dos pasos, una nueva medida de seguridad que Google puso durante el año 2011 y así evitar que alguien más te robe tu cuenta.

La idea de esta configuración es muy simple: recibir una llamada o un mensaje de texto con un código específico para poder entrar en tu cuenta y crear contraseñas adicionales para cada aplicación que uses conectada con tu cuenta de Google. Suena como algo demasido engorroso, pero a decir verdad no lo es porque cada contraseña o dispositivo al que le permitas acceso tendrá 30 días de uso.

También podrás evitar llamadas o SMS si tienes un teléfono inteligente e instalar una aplicación que te mandará el código de verificación que necesites sin necesidad de tener señal ni siquiera, pero solo está disponible para iOS, Android y Blackberry.

Toda la información que necesitas sobre esto lo puedes conseguir en esta dirección pero es muy simple de configurar. Ve a esta dirección y logueate con tu cuenta. El resto es cuestión de seguir los pasos que te da tu administración.

La parte más fastidiosa es que se te pedirán contraseñas adicionales nuevas que son generadas por el sistema pero que tendrás que poner en todas las aplicaciones, incluso las que son de Google. Si tienes sincronización en Google Chrome, por ejemplo, entonces te pedirá que te vuelva a loguear y que pongas las contraseña que haz creado y si tienes un teléfono Android o cualquier otro y manejas tu cuenta por ahí, deberás hacerlo también.

Verificación en dos pasos.